Después de viajar el jueves 24 por la tarde desde Sevilla, con destino Asturias, vinieron a recogerme mis amigos, Rocio y Armando, que habian llegado el dia anterior de viajes de novios de Roma, para llevarme hasta Oviedo, es obvio decir que me aloje en su casa, pues bajo ningún concepto permitió que me fuera al albergue como un peregrino más, que es lo normal en estos casos.
Como llegue un poco tarde pues pospuse mi salida al sábado y así empezar mi camino, aprovechando el viernes , Armando y Rocio como unos auténticos cicerones nos pateamos medio Oviedo, fuimos a la Catedral a recoger mi credencial y sellamos allí y como no, una cena opípara para cargar fuerzas para este periplo.
Ya en la cena y hablando me dijo que hoy sábado hacian ellos una peregrinación con la Hermandad de nuestro Padre Jesús del Cautivo, iban a la prisión recogían a unos treinta presos y andaban hasta Covadonga unos 8 km. Al llegar a ver a la Virgen, se le rezaba la Salve y se le cantaba su himno, y yo sin más pues me apunte a ello, y ya le pediría que ayudara en este nuevo caminar, y así hice.
Quiero darle las gracias públicamente, por su desinterés en hacer que me haya sentido como en mi propia casa, gracias hermanos y AMIGOS.
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